Un Sabor con toda Tradición
Publicación: 25/10/2023
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El pan de muerto es una deliciosa creación culinaria que forma parte fundamental de las celebraciones del Día de los Muertos en México durante el mes de noviembre. Este pan suave y dulce, decorado con símbolos significativos, es una delicia que se disfruta tanto en altares como en las mesas de las familias mexicanas durante esta festividad. A continuación, te guiaré a través de una receta tradicional de pan de muerto para que puedas prepararlo y honrar a tus seres queridos de una manera especial.
Para la Masa:
500 gramos de harina de trigo Fortaleza
100 gramos de azúcar
100 gramos de mantequilla
3 huevos
10 gramos de sal
10 gramos de levadura fresca
60 ml de leche tibia
1 cucharadita de agua de azahar
Ralladura de 1 naranja
Ralladura de 1 limón
Azúcar glas
1 huevo (para barnizar)
Bolitas de masa
Comienza disolviendo la levadura en la leche tibia con una pizca de azúcar. Deja reposar durante unos minutos hasta que comience a espumar.
En un tazón grande, combina la harina, el azúcar y la sal. Agrega la mantequilla y mezcla con las manos hasta que la mezcla tenga una textura arenosa.
Agrega los huevos uno por uno, asegurándote de que estén bien incorporados en la masa.
Vierte la levadura disuelta en la masa y sigue amasando hasta obtener una masa suave y elástica.
Agrega la ralladura de naranja, la ralladura de limón y el agua de azahar a la masa. Amasa durante unos minutos adicionales.
Cubre la masa con un paño húmedo y deja reposar en un lugar cálido durante 1 hora, o hasta que haya duplicado su tamaño.
Precalienta tu horno a 180°C (350°F).
Divide la masa en porciones, una más grande para la base del pan y una más pequeña para formar la parte superior. La porción más grande debe ser redonda y la porción más pequeña se dividirá en pequeñas bolitas para decorar.
Coloca la porción grande de masa en una bandeja para horno previamente engrasada y aplánala suavemente para que tenga forma de círculo.
Coloca la porción más pequeña de masa en la parte superior de la base y, con las bolitas de masa, forma tiras que se cruzan en la parte superior, simulando huesos y una calavera.
Barniza el pan con huevo batido para darle un brillo dorado.
Hornea en el horno precalentado durante aproximadamente 30 minutos o hasta que esté dorado y suene hueco al golpear la base.
Una vez horneado, retira el pan de muerto del horno y déjalo enfriar antes de espolvorear azúcar glas sobre la parte superior.
El pan de muerto es mucho más que un simple pan dulce. Cada uno de sus elementos tiene un significado profundo en la celebración del Día de los Muertos. El círculo representa el ciclo infinito de la vida y la muerte, las bolitas de masa son las lágrimas derramadas por los seres queridos y la calavera y los huesos simbolizan a los difuntos que regresan a la Tierra.
La preparación del pan de muerto es una tradición familiar que une generaciones y honra a aquellos que ya no están físicamente con nosotros. Al hornear y compartir este pan, se celebra la memoria de los seres queridos, se fomenta la conexión con el pasado y se fortalecen los lazos familiares.
El pan de muerto es un verdadero tesoro culinario que no solo deleita el paladar, sino que también alimenta el alma. Al seguir esta receta y compartir este pan con tus seres queridos, participas en una de las tradiciones más hermosas y significativas de la cultura mexicana.
¡Disfruta de cada bocado y de la conexión que proporciona esta deliciosa delicia en el Día de los Muertos!
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Fuente:
Crédito: Foto de Pixabay
Copyright © 2024 MUNSA MOLINOS, S.A. de C.V.
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