MUNSA: Harinas de trigo panificables, sémola de trigo cristalino para pastas y semillas de trigo para cosecha.

Más de 3 mil millones de pesos. Eso fue lo que perdieron los productores de trigo del norte de México en los dos últimos años por el bajo rendimiento de las cosechas, diezmadas por los efectos del cambio climático y la inestabilidad del mercado de cereales. Un duro golpe que puede provocar cambios inminentes en el campo mexicano: el patronato de investigación de Sonora, junto con productores del sur del Estado, analiza implementar nuevas variedades de trigo más resistentes.

El director del Distrito de Riego, Humberto Borbón, mencionó en una comparecencia ante los medios que, además del análisis de nuevas variedades de trigo, también se trabaja en un nuevo paquete tecnológico de riego y fertilización que ayude a mejorar la producción y paliar las pérdidas de los últimos años. El proyecto está enfocado al Valle del Yaqui-Mayo y Fuerte-Mayo, y se pretende que las organizaciones de productores industriales, comercializadores y representantes de los Gobiernos del Estado y Federal se unan a la iniciativa.

El objetivo principal es desarrollar plantas de trigo más duraderas que las actuales y que puedan aclimatarse a los desórdenes climáticos sin sufrir mermas importantes en su rendimiento. El aumento de la competencia es otro de los factores que han propiciado la iniciativa de introducir novedades productivas y tecnológicas en el Valle del Yaqui para mantener el impulso de esta comarca mexicana en el mercado internacional de cereales.

Se prevé que la producción mundial de cereales en 2015 ascenderá a cerca de 2,530 millones de toneladas, es decir, 4,7 millones de toneladas menos de lo anticipado en octubre y 28,4 millones de toneladas (un 1,1 %) por debajo del récord registrado en 2014. La revisión de este mes de noviembre refleja además un empeoramiento de las perspectivas acerca de los cereales secundarios, aunque la previsión sobre el arroz también se ha reducido.

El pronóstico sobre las existencias mundiales de cereales al cierre de las campañas que terminarán en 2016 ha permanecido casi invariable desde el mes anterior, en torno a los 638 millones de toneladas, ya que la reducción de los pronósticos sobre las existencias de maíz en los Estados Unidos, la India y Ucrania fue compensada por el aumento de las existencias en la Unión Europea. A tenor de las últimas previsiones sobre las reservas mundiales, se espera que la relación entre las existencias y la utilización de cereales a escala mundial alcance el 24,8 %, lo que representa una ligera disminución respecto a la relación de la campaña precedente.

Ante estas previsiones, y el impulso de los productores emergentes, México no quiere perder el paso en la ‘batalla’ mundial del trigo y espera renovar su tejido productivo para aumentar su competitividad en un sector que se ha mostrado altamente inestable en los últimos años.

Fuente:

Nota informativa de la FAO sobre la demanda de cereales